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El intendente de Valparaíso, Ricardo Bravo,salió al paso de la polémica surgida entre la Onemi y el alcalde de Isla de Pascua, Petero Edmunds Paoa, luego de que este último acusara que no se le informó de la alerta de tsunami tras un sismo de 7,2 Richter registrado al sur de la porción de tierra, en pleno Océano Pacífico.
Si bien Bravo dijo que intentó hablar con el alcalde de Isla de Pascua pero que no logró comunicarse, indicó que instruyó un sumario interno a la Onemi regional para aclarar el incidente.
"La emergencia se realizó sin ningún problema. El alcalde mismo, en un comunicado, lo resaltó y dijo que no hubo problemas en ese sentido, pero que en particular a él no le llegó la comunicación", indicó.
Bravo agregó que "anoche intenté en dos oportunidades llamar al alcalde. Lamentablemente no tuve respuesta, me imagino justamente por las dificultades que hay en las comunicaciones. Le mandé un mensaje electrónico por Whatsapp que todavía me aparece como no visto".
"Entiendo que hay problemas de esas características y creo que hay que avanzar, por eso insisto en mejorar las comunicaciones, especialmente en el caso de la Isla de Pascua y en Juan Fernández", sostuvo el intendente.
El jefe de alerta temprana en la Onemi, Miguel Ortiz, reiteró su rechazo a las críticas del jefe comunal y que la comunicación con la isla fue fluida, asegurando que Edmunds Paoa fue notificado por los canales correspondientes.
"La comunicación, de acuerdo a los datos entregados por el comité provincial, es que la información fluyó hacia el nivel local y el alcalde fue notificado de esta situación. Isla de Pascua cuenta con teléfono satelital, hay pruebas que se hacen de forma periódica. Dejar claro que los sistemas de alerta operaron en base a todos los protocolos vigentes", aseguró.
COOPERATIVA.CL
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