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Más de 50 motos llegaron hasta el lugar la tarde del domingo.
Valentina Bustamante
Ansiosos estaban los niños del Pequeño Cottolengo de Rancagua la tarde del domingo, la razón era la visita navideña de un grupo de motoqueros. A eso de las 4 de la tarde comenzaron a sentirse lo motores y una a una fueron llegando las motocicletas hasta las dependencias del hogar, el más llamativo fue un Viejito Pascuero con casco, lentes oscuros y chaqueta de cuero, que hizo su entrada tocando la bocina para animar a los niños.
El grupo, de más de 50 motoqueros, hace la visita al lugar con el fin de entregar una tarde de diversión para los niños según explicó Luis Cortez de la agrupación motoqueros Brio de Rancagua, “Llevamos dos años haciendo el evento de navidad con los niños, con las motos y los paseos, y todo ha salido muy bonito, son niños muy especiales, uno sale de acá muy emocionado”.
El momento de los paseos en moto fue el más disfrutado por los niños, quienes hicieron una fila para esperar su turno. Según Cortes para esta ocasión se juntaron motoqueros de Rancagua, Colina, Peñaflor, Talagante, Melipilla, Batuco y otras localidades, “hay varias agrupaciones de motoqueros y otros que son independientes, pero todos viene acá a ayudar y disfrutar”
El motoquero Luis Cortez afirma la intención es seguir realizando esta actividad año a año “vamos a venir todos los años en la misma fecha compartiendo con los niños, entregando una tarde de alegría, de humor, de cariño, porque los niños realmente se lo merecen.”
EL RANCAGUINO
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