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Los hechos de esta historia ocurrieron el día sábado 8 de marzo, cuando el furgón utilitario patente EU 5650, se trasladaba en dirección a Santa Cruz.
Han pasado 15 días. Un poco más recuperados de la pesadilla que les tocó vivir en la Ruta I-720, que une Santa Cruz con Lolol, el matrimonio conformado por Marilú Cabrera Silva de 31 años y José Correa Orellana de 37 años, cuentan la historia y dicen que gracias a Dios no perdieron la vida luego que una camioneta los chocara en el sector de Lalajuela. “Fue horrible los que nos tocó vivir” dice Marilú, “viajábamos tranquilamente por la ruta en dirección a Santa Cruz y al llegar a la cuesta de Lalajuela una camioneta se nos vino encima y nos chocó. No me acuerdo de nada, sólo cuando llegó una mujer y nos pedía disculpa y que por favor no dijéramos que su hermano venía conduciendo la camioneta y que ella era la responsable”, dice la afectada.
Los hechos de esta historia ocurrieron el día sábado 8 de marzo cuando el furgón utilitario patente EU 5650, se trasladaba en dirección a Santa Cruz. El reloj marcaba las 7:40 de la mañan, era el segundo día de la Fiesta de la Vendimia, y al llegar al sector de la cuesta de Lalajuela, el matrimonio que viajaba en compañía de otra persona identificada como Cristian Cabrera Silva de 22 años, observaron una camioneta que zigzagueaba en la ruta y esta se habría ido en contra del furgón, chocándolos y dejándolos atrapados en el vehículo de transporte.
El presunto autor y conductor de la camioneta fue identificado como R.G., quien sólo lamentaba el accidente, dice la pareja, hasta que en un momento apareció una mujer, la que se identificaba como M.G. Al llegar, dice el matrimonio, les señaló que ella conducía la camioneta y era la responsable. Al llegar Carabineros se habría hecho pasar por la conductora para evitar que su hermano fuera detenido por conducir presuntamente en estado de ebriedad.
“Al llegar Carabineros la gente comenzó a decir que no, que ella mentía y que el verdadero culpable era el joven conductor. Luego él reconoce su autoría en el accidente, siendo finalmente detenido y trasladado hasta el Hospital de Santa Cruz para realizarle la alcoholemia de rigor”, dice la afectada.
El tiempo ha pasado y el matrimonio dice que la actual empleada municipal sólo les ha ofrecido un pago de un millón de pesos por los daños. La pareja no está de acuerdo y exigen que se les cancele el valor de lo que realmente les costó el vehículo, vale decir 2 millones de pesos, más los daños provocados en el accidente. “Exigimos justicia y esperamos que nos respondan por todo. Nos destruyeron nuestro material de trabajo, para eso compramos este furgón, para traslado de temporeros y ese día viajábamos a trabajar a El Huique. En cosas de segundos un irresponsable nos destruyó todo y más aun tratando de engañar a Carabineros. Eso no puede ser, esperamos que los tribunales le exijan que nos paguen los daños porque hasta la fecha nadie nos da una respuesta, justicia, nada más que justicia exigimos”, dijo la afectada.
José Pinto-Fernando Ávila
El Rancaguino
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