Disminuir atochamientos vehiculares en Pichilemu requiere medidas a largo plazo

Miles fueron las personas que llegaron este fin de semana último al balneario de Pichilemu, quienes disfrutaron de la llegada del año nuevo en el mar, así como de las bondades que ofrece el principal balneario de la Región de O’Higgins.
Junto a los turistas también llegan los tradicionales atochamientos vehiculares, los que comienzan al ingreso de la comuna, tal vez, la cara menos amigable de la época estival. Respecto a esta situación, el alcalde de la comuna, Roberto Córdova, sostuvo que se trata de un tema que sucede en cualquier balneario que recibe a tantos turistas, reconociendo que la gente se complica por el tema.
Es así como cree que se tomarán algunas medidas paliativas, estudiando alternativas que modifiquen alguna entrada de vehículos, ya que aduce que “es imposible hacerle una calle a la gente para solucionarle el problema durante la marcha. Es una tema de planificación y de largo plazo”, sostuvo la autoridad.
Roberto Córdova añadió que se está trabajando en un par de alternativas viales que se estudian junto a la Seremía de Vivienda, así como llegar a un acuerdo con Ferrocarriles del Estado para poder concretar un segundo ingreso a la comuna, temas que son a largo plazo. “Por lo menos hay dos iniciativas de proyectos desde el punto de vista vial, las que se están trabajando como municipalidad, una como con el Ministerio de Vivienda, tema interno que cruza la comuna con una alternativa vial que une la comuna con Avenida Cáhuil y el sector de Infiernillo, y otra con respecto a los accesos a la comuna”, indicó el alcalde.
La autoridad pichilemina cree que quienes llegan al balneario por lo general están acostumbrados a los atochamientos vehiculares, citando como ejemplo la ciudad de Rancagua. Cree que este tipo de hechos debieran resultarse en términos positivos, destacando a la gran cantidad de gente que llegó a la comuna a celebrar la llegada del nuevo año.

EL RANCAGUINO