Con una goleada de 4-1, los celestes sumaron una gran victoria que los deja a tres puntos del líder del campeonato.
Ricardo Obando
Fue el O’Higgins de la temporada pasada, de buen fútbol, de ataque, de contundencia. El Capo de Provincia goleó a Cobreloa 4-1 anoche en el estadio El Teniente y ratificó en casa que, la victoria sobre Colo-Colo de la semana pasada no fue casualidad.
Esquemas similares y ambos con la intensión de jugar ofensivamente. Desde el primer minuto, el “Clásico del Cobre” fue encendido. El Capo, volvió a su tradicional rostro con tres puntas gracias al regreso de Luis Pedro Figueroa. Además, la ausencia de Yerson Opazo (expulsado contra Colo-Colo) hizo que Facundo Sava hiciera retroceder a la banca a César Fuentes y Juan Fuentes ocupó el medio terreno junto a Braulio Leal. La fórmula, fue la misma que utilizó en este mismo recinto frente a la U.
Así, en los 5’, los celestes avisaron. Luis Pedro Figueroa se metió al área loina y cuando se apretaba a rematar, un defensor le pinchó el balón y, desde atrás, apareció Gastón Lezcano. El “Gato” hizo trabajar al meta Sebastián Contreras que ahogo el grito de gol.
Más aún, en los 14’ el propio Lezcano encabezó un contragolpe que Figueroa pudo concretar pero nuevamente Contreras estuvo notable. Eso sí, en la contra, Cobreloa mató en su primera ocasión.
Alejandro López le cometió penal (clarísimo) a Gabriel Méndez y Claudio Puga cobró ajustado a reglamento. El propio delantero argentino batió a Jorge Carranza en los 15’ y la visita, pasó arriba.
Con el 0-1 los celestes se fueron arriba para tratar de igualar rápidamente. Un pase profundo de Luis Valenzuela para Octavio Rivero que apareció destapado por la derecha y, el charrúa, ingresó al área en diagonal y no perdonó. Golazo. 1-1 y todo comenzaba desde cero.
La presión rancagüina fue tal que, en 180 segundos, dio vuelta el marcador. En los 24’, nuevamente un pase profundo de Valenzuela para Gastón Lezcano y el delantero, hizo valer la “Ley del Ex”. El “Gato” se sacó al portero Sebastián Contreras y, con un toque suave, anotó el 2-1.
Pero, los “Zorros del Desierto” no se quedaron atrás. Méndez, principal baluarte de ataque, sacó un centro desde la izquierda y con un cabezazo Sebastián Roco estrelló la pelota en el horizontal cuando Carranza estaba batido. Los Naranjas querían igualar y eso hacía aún más animado el partido. A esa altura, los esquemas no variaban y el mano a mano en cada defensa hacía que las ocasiones de gol llegaran con más rapidez que en otros encuentros.
Con ello, el Capo tuvo en los 40’ una oportunidad más para aumentar su ventaja y Octavio Rivero les ganó a todos en el área, guapeó y gatilló con todo un balón que le quedó cómoda para la zurda. Contreras hizo el intento de manotear pero el tiro fue violento y nuevamente a festejar. O’Higgins aumentaba la distancia y con un 3-1, pudo trabajar de forma más cómoda el partido.
Inclusive, Braulio Leal en los 45’ pudo poner el cuarto tanto pero su definición, desde fuera del área fue poco ajustada.
COMPLEMENTO TRANQUILO
En el segundo tiempo, si bien Cobreloa intentó llegar a algún descuento, el elenco de Marcelo Trobbiani se preocupó más de defender que de atacar.
O’Higgins bajó en algo sus revoluciones y se dedicó a administrar la ventaja. Inclusive ésta la pudo aumentar ya que, en los 59’, Luis Pedro Figueroa entró solo al área tras un pase notable de Lezcano. La puntería no fue la adecuada al momento de la definición.
¿Más acciones de gol? Pocas. El partido entró en un limbo y los más de nueve mil espectadores que llegaron anoche al Estadio El Teniente aprovecharon para alentar al Capo con varios gritos y, de paso, aplaudir los cambios que introdujo Facundo Sava.
Los aplausos se los llevó Luis Valenzuela y Luis Pedro Figueroa. Ambos, de gran partido, mostraron un fútbol atildado y ya conocido.
Pero, uno que también se ganó ovación fue César Fuentes. El volante, improvisado como lateral, aprovechó un rebote de Contreras tras un cabezazo de Rivero y, el canterano, con un zapatazo bien colocado puso el 4-1.
A la postre, una gran victoria rancagüina que dejó en claro que el equipo se ha aceitado (como dice Facundo Sava) y, además, ratificó que la victoria de la fecha anterior en el estadio Monumental sobre Colo-Colo no fue casualidad. El equipo está jugando bien, cuenta con jugadores encendidos y además, el finiquito lo está acompañando.
En la próxima fecha, el Capo de Provincia viajará hasta Chillán para enfrentar a Ñublense el sábado 23 a las 15:30 horas en el estadio Nelson Oyarzún.
El Rancaguino
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