Bidones abandonados causaron gran despliegue de Bomberos

Cuatro bidones con unas etiquetas artesanales que señalaban que contenían sustancias químicas, además de un saco roto con un polvo con una consistencia parecida a la de la harina, fueron dejados por desconocidos tras un container ubicado frente al monumento a la Familia Minera, a metros del restaurante Hornitos del Cobre en el sector Tierras Blancas en la Carretera del Cobre.

Estos contenedores fueron encontrados por Carabineros de Machalí, quienes ante el desconocimiento sobre qué sustancia contenían, solicitaron el apoyo de Bomberos de Machalí. Los voluntarios, una vez que llegaron al lugar, realizaron los protocolos propios de una emergencia química. Al encontrarse a favor del viento, por precaución, fue evacuado el restaurante Hornitos del Cobre y voluntarios debidamente encapsulados con trajes que los aíslan del ambiente confirmaron que no hubiese fuga en los recipientes. Pero, persistía la duda sobre el contenido de los bidones y, por lo tanto, la manera segura de disponer de estos químicos dejados al borde de la carretera.

Debido a que Bomberos de Machalí no disponía entre sus equipos la manera de medir el ph de los elementos, solicitaron la presencia de la unidad Hazmat de la Primera Compañía del Cuerpo de Bomberos de Rancagua con el apoyo de la Segunda Compañía de la capital regional. La unidad especializada confirmó lo observado por los voluntarios de Machalí y realizaron mediciones sobre los elementos químicos comprobando que se trataba de un líquido alcalino y corrosivo.

El problema que se presentó nuevamente en este caso, y en otras emergencias químicas que han ocurrido en nuestra región, fue el de disponer de un lugar donde trasladar estos elementos peligrosos. Según señalaron desde la unidad Hazmat, las únicas bodegas de materiales peligrosos existentes pertenecerían a empresas privadas, por lo que hay que solicitar a alguna de las pocas empresas presentes en nuestra zona que se hagan cargo de los elementos. 

Durante la noche del viernes fue personal de la empresa Rec Metalplas quienes se trasladaron hasta el lugar con un overpack, recipiente especial para el traslado de elementos peligrosos, para almacenar hasta el lunes estos bidones, día en que serán enviados a laboratorios de Santiago para su análisis y destrucción. El trabajo bomberil, que a ratos obligó al corte de una pista de la Carretera del Cobre, causó gran expectación entre quienes circulaban por la ruta a esa hora.

Luis Fernando González

Fotos: Héctor Vargas.

El Rancaguino